Un plan para una tarde de otoño: salir al campo. recoger unas castañas, sacar unas preciosas fotos con esa luz de la estación, volver a casa, lavar y hacer una pequeña hendidura en la piel de las castañas, cocerlas durante unos veinte minutos en agua con sal, pelarlas y molerlas para terminar haciendo una pequeña tarta abizcochada.
Los ingredientes, muy sencillos:
- 180 g de castañas peladas.
- 180 g de azúcar (yo he empleado una mezcla de 100 g de azúcar blanquilla, 60 g de azúcar de caña y 20 g de azúcar avainillado)
- 3 galletas de avena con chocolate.
- 3 huevos y una pizca de bicarbonato.
Para elaborarla simplemente picamos las castañas con el azúcar y las galletas, cuando todo esté bien mezclado, batimos tres huevos y los añadimos a la mezcla anterior junto con una cucharadita de bicarbonato.
Vertemos la mezcla sobre un molde (15x20 cm) cubierto con papel de hornear e introducimos en el horno a 180 ºC durante media hora.
Sacamos, desmoldamos y dejamos enfriar un poco antes de merendar.