Elegimos una copa amplia, en este caso una copa amplia tipo Borgoña. Colocamos un yogur griego en la base y encima dos cucharadas de miel. Rematamos con dos cucharadas de nueces picadas.
Un postre sencillo, sin complicaciones.
¿Demasiado sencillo?
Si queremos complicarnos un poco más podemos preparar unos mini-muffins a partir de la mezcla anterior. Mezclamos bien añadimos dos huevos y el zumo de medio limón. Cuando esté todo bien incorporado lo mezclamos ligeramente con 210 g de harina tamizados con una cucharada de levadura y media cucharadita de bicarbonato. Rellenamos unos moldes pequeños cubiertos de papel y horneamos sobre la rejilla a 180 ºC, solo la parte de abajo, durante 25 minutos.