La clave está en utilizar semillas de cardamomo finamente molidas. Las encontramos en herboristerías. Necesitaremos los granos que vienen en el interior de siete capsulas, los moleremos. Y además...
Ponemos el horno a calentar a 220 ºC para que coja calor. Utilizando las varillas de la batidora, a una velocidad baja, mezclamos 40 g de mantequilla que tendremos a temperatura ambiente y 40 ml aceite. Formamos una crema, añadimos 80 g de azúcar blanquilla y 20 g de azúcar avainillado y continuamos batiendo. Incorporamos dos huevos de uno en uno, batiendo suavemente.
Tamizamos 250 g de harina con una cucharada de levadura Royal y añadimos un tercio al batido anterior, mezclamos y añadimos 90 ml de leche con las semillas de cardamomo molidas muy finas. Mezclamos, añadimos otro tercio de harina, batimos, añadimos los otros 90 ml de leche y terminamos con la harina. Mezclamos bien.
Rellenamos las capsulas de magdalenas (nos salen unas 15) y horneamos durante 20 minutos a 190 ºC (bajamos la temperatura) sobre la rejilla a media altura.
Sacamos del horno y glaseamos con una mezcla hecha con una cucharada de leche caliente y cuatro cucharadas de azúcar.
Sacamos del horno y glaseamos con una mezcla hecha con una cucharada de leche caliente y cuatro cucharadas de azúcar.