En este caso los polos serán de turrón así aprovecharé una tableta de turrón duro que está en el armario desde las navidades.
Lo primero hay que picar 100 g de turrón en la picadora, cuesta un poco porque el turrón duro hace honor a su nombre y se resiste al principio aunque al final se consigue una masa granulada que mezclaremos con 200 ml de nata de montar y un poco de leche para aligerarlo.
Finalmente vamos rellenando los moldes de polo y colocando el palito. Los dejamos en el congelador durante toda la noche y al día siguiente tendremos un postre muy refrescante.