He sustituido la tradicional masa de hojaldre por pasta brick que es una lámina muy fina hecha con harina y prácticamente sin grasa. La lámina de pasta brick la he comprado refrigerada en Carrefour.
Comenzamos pelando tres manzanas, yo he elegido de la variedad reineta que le dará un toque ácido, si escogemos la variedad golden nos quedará más suave. Las descorazonamos, las troceamos y mezclamos con dos cucharadas de azúcar moreno, dos cucharadas de mermelada de albaricoque, dos cucharadas de nueces machacadas en el mortero, una cucharada de uvas pasas y una cucharada de mantequilla.
Calentamos a fuego medio durante quince minutos, removiendo de vez en cuando y dejamos templar.
Extendemos las láminas de pasta brick y ponemos tres montoncitos del relleno un poco separados. Envolvemos la masa sobre el relleno y enrollamos. Sellamos pintando con mantequilla derretida en el microondas y colocamos sobre la bandeja del horno.
Horneamos 12 minutos a 180 ºC y servimos templados.
